Recién llegado de los paises bajos me hallo. Y como no podía ser menos, me han pasado unas cuantas cosas curiosas, así que como no me encuentro muy inspirado las voy a soltar tal cual vayan saliendo.
Primero, el avión salió con retraso, lo que me dio tiempo suficiente para sacarle el número de teléfono a la chica que tenía sentada a mi lado. Se trataba de una RRHH de Eslovaquia que, como yo, viajaba a Amsterdam a ver sus relativos.
Llamame, guapo!
Al llegar a Leiden nos metimos en un bar petado de gente de la ESA, donde conocí a un tío de SANTA FÉ (Nunca se sabe si vas a tener antojos en piononos en una misión espacial), con el cual pude practicar un poco de Granaíno y sacar de los nervios a una chica de castellón que andaba por ahí.
Al día siguiente fuimos de visita a las instalaciones de la ESA donde se exponían montones de maquetas a tamaño real de satélites y demás cacharros espaciales. Después de la escursioncilla me fui a ver los molinos donde un yonki con mucha educación me pidió pelas para ¨volver a su pueblo en autobús¨
Después tocaba marcha por la capital. Bebiendo becherovka en el tren conocimos una pareja de cuarentones que se nos acoplaron y bebieron a morro de la botella, muy jóvenes ellos. Luego tras esperar 40 min en una cola conseguimos entrar a un antro de mala muerte donde una inglesa borracha me soltó un beso por poder hablar un poco de aleman, Du bist eine geile schlampe...
Trae pa cá la botella niño que esto está mu rico.
Al día siguiente nos metimos en la casa de unas griegas que celebraban su cumpleaños, no sin antes comprar un oso de como medio metro de grande, cuya dueña no soltó en toda la fiesta. En la fiesta había mucho griego, y parte del equipo femenino de basket. Teniendo en cuenta que las holandesas son altas de por sí, os podéis imaginar el panorama, pobres españoles bajitos...
Volver a casa ciego perdío siendo transportado en bici es un poco movida, y dolor de hojaldre más bien. Hacía como cinco años que no pillaba una bicicleta de paseo y el alcohol no ayudaba mucho, la verdad sea dicha.
Me estoy riendo pero llevo los cojones partios
Tras dos dias en Den Haag volví a la República donde estuve dos horas tirado en la estación de Praga esperando mi autobús donde me tocó ir al lado de una señora que tenía una manera muy peculiar de dormir (por decirlo de alguna manera). Así que me fuí a la cama y al dia siguiente a currar!!!!
Conclusión, unos dias con parte de mis mejores amigos haciendo de las nuestras en el país de los molinos, las bicicletas y los zuecos.Y tú? Qué has hecho en estos días?
Primero, el avión salió con retraso, lo que me dio tiempo suficiente para sacarle el número de teléfono a la chica que tenía sentada a mi lado. Se trataba de una RRHH de Eslovaquia que, como yo, viajaba a Amsterdam a ver sus relativos.
Llamame, guapo!Al llegar a Leiden nos metimos en un bar petado de gente de la ESA, donde conocí a un tío de SANTA FÉ (Nunca se sabe si vas a tener antojos en piononos en una misión espacial), con el cual pude practicar un poco de Granaíno y sacar de los nervios a una chica de castellón que andaba por ahí.
Al día siguiente fuimos de visita a las instalaciones de la ESA donde se exponían montones de maquetas a tamaño real de satélites y demás cacharros espaciales. Después de la escursioncilla me fui a ver los molinos donde un yonki con mucha educación me pidió pelas para ¨volver a su pueblo en autobús¨
Después tocaba marcha por la capital. Bebiendo becherovka en el tren conocimos una pareja de cuarentones que se nos acoplaron y bebieron a morro de la botella, muy jóvenes ellos. Luego tras esperar 40 min en una cola conseguimos entrar a un antro de mala muerte donde una inglesa borracha me soltó un beso por poder hablar un poco de aleman, Du bist eine geile schlampe...
Al día siguiente nos metimos en la casa de unas griegas que celebraban su cumpleaños, no sin antes comprar un oso de como medio metro de grande, cuya dueña no soltó en toda la fiesta. En la fiesta había mucho griego, y parte del equipo femenino de basket. Teniendo en cuenta que las holandesas son altas de por sí, os podéis imaginar el panorama, pobres españoles bajitos...
Volver a casa ciego perdío siendo transportado en bici es un poco movida, y dolor de hojaldre más bien. Hacía como cinco años que no pillaba una bicicleta de paseo y el alcohol no ayudaba mucho, la verdad sea dicha.
Me estoy riendo pero llevo los cojones partiosTras dos dias en Den Haag volví a la República donde estuve dos horas tirado en la estación de Praga esperando mi autobús donde me tocó ir al lado de una señora que tenía una manera muy peculiar de dormir (por decirlo de alguna manera). Así que me fuí a la cama y al dia siguiente a currar!!!!
Conclusión, unos dias con parte de mis mejores amigos haciendo de las nuestras en el país de los molinos, las bicicletas y los zuecos.Y tú? Qué has hecho en estos días?
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